De Stem a Steam
El actual currículo heredado de la era industrial, que muestra un profundo énfasis en la transmisión y reproducción de conocimiento, no está siendo capaz de preparar a los futuros ciudadanos, para vivir y desenvolverse con éxito en una era globalizada del saber, siendo capaces de afrontar un mundo en incesante cambio. La presencia de la tecnología en todos los ámbitos del ser humano modifican permanentemente la manera en que las personas se comunican y colaboran entre sí, cómo se produce conocimiento y los requisitos del mercado laboral al que deben incorporarse.
Con esta perspectiva y con el fin de llegar a ser personas felices, saludables, con capacidad de contribuir al bien común de la sociedad, los ciudadanos del mañana requerirán de habilidades analíticas y comunicativas, capacidad de resolución de problemas, creatividad e iniciativa, y saber colaborar de manera constructiva y efectiva con personas y máquinas.
Las competencias del siglo XXI son aquellas destrezas, conocimientos y actitudes necesarias para enfrentarse con éxito a los retos de los nuevos tiempos, y que nos invitan a reformular nuestras inquietudes en materia de aprendizaje y a hacerlas más necesarias en el futuro próximo.
Estas competencias se dividen en cuatro categorías:
Maneras de pensar:
· Creatividad e innovación: capacidad para generar ideas originales que tengan valor en la actualidad y para interpretar de distintas formas situaciones reales y visualizar una variedad de respuestas ante un problema o circunstancia.
· Pensamiento crítico: capacidad de interpretar, analizar, evaluar, hacer inferencias, explicar y clarificar significados.
· Resolución de problemas: capacidad de plantear y analizar problemas para generar alternativas de solución eficaces y viables.
· Aprender a aprender: capacidad de conocer, organizar y autorregular el propio proceso de aprendizaje.
Herramientas para trabajar:
· Apropiación de las tecnologías digitales: capacidad para explorar, crear, comunicarse y producir utilizando la tecnología como herramienta.
· Manejo de la información: capacidad para acceder a la información de forma eficiente, evaluarla de manera crítica y utilizarla de forma creativa y precisa.
Maneras de trabajar:
· Comunicación: capacidad que abarca el conocimiento de la lengua y la habilidad para utilizarla en una amplia variedad de situaciones y mediante diversos medios.
· Colaboración: capacidad de trabajar de forma efectiva con otras personas para alcanzar un objetivo común, articulando los esfuerzos propios con los de los demás.
Maneras de vivir en sociedad:
· Vida y carrera: abarca, por ejemplo, capacidades de planeamiento y fijación de metas; capacidades para persistir y sortear obstáculos en el camino, como la resiliencia, la tolerancia a la frustración, el esfuerzo y el diálogo interno positivo.
· Responsabilidad personal y social: capacidad de tomar decisiones y actuar considerando aquello que favorece el bienestar propio, de otros y de nuestro entorno, comprendiendo la profunda conexión que existe entre todos ellos.
· Ciudadanía local y global: capacidad de asumir un rol activo, reflexivo y constructivo en la comunidad local, nacional y global, comprometiéndose con el cumplimiento de los derechos humanos y de los valores éticos universales.
[Fuente: Competencias del siglo XXI]
¿Qué persigue STEM?
STEM es el acrónimo anglosajón de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, que introdujo en el sistema educativo un primer enfoque interdisciplinar con el objetivo de potenciar la capacidad del alumnado para observar y experimentar con el fin de producir resultados aplicando la ciencia, desarrollando sistemas efectivos que diesen respuesta a retos del mundo real aplicando las bases de la ingeniería.
¿Qué incorpora STEAM?
Este nuevo enfoque ampliado con Arte ha sido acuñado en la Escuela de Diseño de Rhode Island (EE.UU) y persigue centrar Arte y Diseño en el eje central de STEM, fomentar la integración de las disciplinas artísticas en el currículo educativo de Primaria, Secundaria y Bachillerato; y promover la incorporación de artistas y diseñadores a los equipos de trabajo como elementos potenciadores de la innovación en el ámbito laboral.
¿Qué aporta STEAM al alumnado?
Fomenta el uso del razonamiento basado en evidencias durante el proceso de toma de decisiones e incorpora en la metodología presentada al alumno aprender haciendo.
¿Por dónde empezar?
Los centros educativos que quieran iniciarse en STEAM no deben pasar primero por STEM, ambos enfoques metodológicos pueden incorporarse al proyecto educativo indistintamente, la diferencia está en el hecho de disponer de docentes especialistas en las disciplinas de Ciencias, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas, que estén dispuestos a generar un espacio de trabajo multidisciplinar que tenga un visión competencial principalmente y no meramente académica.