¿En qué etapa del lenguaje se encuentra mi hijo?
El lenguaje es la capacidad que tiene el ser humano para expresar sus pensamientos y comunicarse, facilita el desarrollo cognitivo y permite la resolución de problemas.
La adquisición de esta capacidad se divide en dos etapas: prelingüística y lingüística. Estas etapas vienen divididas por edades, las cuales son orientativas ya que cada niño tiene un ritmo de aprendizaje diferente.
Etapa prelingüística (0 – 12 meses)
Esta etapa abarca desde el nacimiento del bebé hasta los 12 meses aproximadamente. Los niños comienzan a divertirse con la emisión de sus propios sonidos y descubren diferentes posibilidades a la hora de emitirlos.
En este periodo es muy importante la relación madre – hijo y las características individuales de cada niño.
En los primeros 6 meses se puede observar como los niños discriminan sonidos, tienen risas espontáneas, murmullos y juegos vocálicos. A partir de este mes hasta el primer año de vida nuestros hijos comenzarán a responder a su nombre, aparecerá el balbuceo y con ello la intencionalidad del lenguaje.
Etapa lingüística (1 – 6 años)
En torno al primer año, los niños comienzan a pronunciar sus primeras palabras, surgen las holofrases (una palabra para varias situaciones) y el lenguaje combinatorio (dos palabras) para poco a poco ir ganando características del habla adulta.
Al cumplir el primer año, la mayoría de los niños pasan a la fase de una palabra: han aprendido que los sonidos tienen significados y tratan de utilizarlos para comunicarse, aunque entenderán más palabras de las que producen (“papá”, “mamá”, “más”).
A los 18 meses aproximadamente, pasan de aprender una palabra por semana a una palabra por día, y antes de los 2 años los niños comenzarán a combinar dos palabras, creando oraciones simples (“come pan”, “más leche”).
Cerca de los 30 meses aproximadamente, el lenguaje crece rápidamente y las oraciones se hacen más complejas y largas. Las narraciones de nuestros hijos se centran en el momento presente y se generaliza la conjugación de los verbos irregulares (“rompido” por “roto”).
A los 4 años, serán capaces de dominar diferentes tipos de frases y es el momento de las preguntas, comenzando a recordar historias y a contarlas. Al llegar a la edad escolar, los niños ya comprenden frases complejas, dobles sentidos y frases hechas.
Durante todo el desarrollo del lenguaje, los adultos jugamos un papel esencial. Somos guías que ayudan a establecer las bases de un aprendizaje lingüístico que es fundamental para el crecimiento cognitivo, emocional y social de nuestros niños. Por ello ante cualquier indicio de alteración es importante acudir a un logopeda para prevenir futuras dificultades tanto a nivel de comunicación como a nivel académico.